En el municipio de Celestún, Yucatán, un policía estatal recurrió a una resortera para capturar a un presunto ladrón que se había refugiado en el techo de una vivienda. El sospechoso, conocido como “El Pinocho”, lanzaba piedras a los oficiales para evitar su detención, lo que complicaba las labores de los agentes.
El oficial utilizó la resortera para distraer al individuo, permitiendo que otros elementos de la policía se acercaran y lo sometieran. Este inusual método de aprehensión quedó registrado en video y rápidamente se viralizó en redes sociales, generando una ola de comentarios por parte de los usuarios.
El detenido, junto con otro hombre apodado “La Morsa”, enfrentan acusaciones por el robo a un comercio local. Ambos fueron trasladados a la cárcel municipal para rendir cuentas ante las autoridades correspondientes.
La acción ha despertado un debate en torno a los métodos utilizados por las fuerzas del orden, destacándose tanto la creatividad del agente como la necesidad de contar con equipamiento adecuado para enfrentar estas situaciones.
