En un alarmante informe, se dio a conocer que menores de edad, desde los 10 años, están teniendo contacto con la droga conocida como cristal en el estado de Veracruz. Según autoridades y especialistas en salud pública, esta situación refleja un preocupante incremento en el alcance del narcotráfico y la falta de prevención en comunidades vulnerables.
Las consecuencias del consumo de cristal son devastadoras, especialmente en niños y adolescentes, ya que afecta gravemente su desarrollo físico y mental. Además, genera altos niveles de dependencia en un tiempo muy corto.
Organismos de prevención de adicciones han señalado la necesidad urgente de reforzar las campañas de concientización en escuelas, comunidades y familias. También han pedido a las autoridades fortalecer las medidas de seguridad para combatir la distribución de estas sustancias en el estado.
El llamado es a los padres y cuidadores para que estén atentos a los comportamientos de los menores y busquen ayuda profesional en caso de identificar señales de alerta relacionadas con el consumo de drogas.
