Ciudad de México — La congestión en el pecho es una molestia común que puede aparecer con gripes, alergias o bronquitis. Afortunadamente, existen métodos caseros y clínicamente recomendados para descongestionar el pecho de forma rápida y segura, que pueden aplicarse desde casa con insumos accesibles.
🔸 Vaporizaciones: el remedio de la abuela, respaldado por la ciencia
Inhalar vapor caliente es uno de los métodos más eficaces. Puedes hacerlo colocando agua hirviendo en un recipiente, añadir unas gotas de eucalipto o mentol y cubrir tu cabeza con una toalla mientras inhalas. Esto ayuda a diluir la mucosidad atrapada en bronquios y vías respiratorias altas.
🔸 Ducha caliente y humidificador
Bañarse con agua caliente o usar un humidificador en tu cuarto también facilita la respiración y alivia la presión torácica. La humedad afloja la flema acumulada y calma la tos seca.
🔸 Hidratación constante
Beber líquidos calientes —como tés, caldos y agua tibia— ayuda a mantener el moco menos espeso. Especialistas recomiendan evitar bebidas frías, ya que pueden irritar aún más las vías respiratorias.
🔸 Golpecitos en la espalda (percusión torácica)
Esta técnica se usa en fisioterapia respiratoria y puede realizarse en casa. Consiste en dar suaves golpecitos con la palma hueca en la espalda alta para ayudar a mover la mucosidad hacia los bronquios principales, facilitando su expulsión al toser.
🔸 Medicamentos y cuándo acudir al médico
En casos más severos, puede requerirse un mucolítico o broncodilatador, especialmente si hay antecedentes de asma, bronquitis o EPOC. Si hay fiebre, dolor intenso, sangre en el esputo o dificultad grave para respirar, lo ideal es consultar de inmediato a un médico.
En resumen, con vapor, hidratación y descanso puedes aliviar la congestión torácica. Pero nunca minimices síntomas persistentes o severos. Escuchar al cuerpo es clave.