Ciudad de México.- El gobierno federal dejó de incluir el desvío de hidrocarburos en el informe diario de seguridad, eliminando un indicador clave que detallaba el robo de combustible en la red de ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Hasta el cierre del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se reportaba diariamente que alrededor de 4,700 barriles eran sustraídos mediante tomas clandestinas, especificando los puntos exactos de los ductos afectados, incluyendo tramos y kilómetros.
Sin embargo, desde el 1 de octubre de 2024, esta información fue excluida de los reportes, dejando un vacío sobre el impacto real del robo de combustible.
Cambio de enfoque en la administración de Sheinbaum
La administración de Claudia Sheinbaum ha optado por priorizar la difusión de operativos contra el huachicoleo, pero sin detallar las cifras sobre las pérdidas reales en los ductos de Pemex causadas por el crimen organizado.
Este cambio ha generado cuestionamientos sobre la transparencia en la estrategia de combate al robo de hidrocarburos, un delito que continúa representando una importante amenaza para los recursos del país.