viernes, abril 25, 2025
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¿Renunciaste? ¡Que no te dejen sin tu aguinaldo!

Si dijiste adiós a tu trabajo antes de terminar el año, ¡tranquilo! Aunque ya no estés en la nómina, el aguinaldo proporcional es tu derecho por ley. Así que no te despidas sin echar mano de este dinerito que, bien calculado, puede salvarte para los regalos de Navidad o el recalentado.

¿Qué es el aguinaldo y por qué te toca?

De acuerdo con la Ley Federal del Trabajo (artículo 87), todos los trabajadores tienen derecho a recibir un aguinaldo equivalente a, por lo menos, 15 días de salario. Si estuviste menos tiempo en la empresa, te corresponde una parte proporcional de acuerdo con los días que trabajaste.

¿Cómo calcular tu aguinaldo proporcional?

Saca la calculadora (o el celular) y sigue estos pasos:

  1. Obtén tu salario diario
    Divide tu sueldo mensual entre 30:
    • Si ganas $12,000 al mes:
      12,000 ÷ 30 = $400 diarios.
  2. Calcula lo que te tocaría por 15 días
    Multiplica tu salario diario por 15 (los días de aguinaldo mínimos):
    • 400 × 15 = $6,000.
  3. Calcula el valor diario del aguinaldo
    Divide el monto anterior entre 365 días del año:
    • 6,000 ÷ 365 = $16.438 diarios.
  4. Multiplica por los días trabajados
    Si trabajaste, por ejemplo, 90 días (tres meses):
    • 16.438 × 90 = $1,479.42 pesos.
    ¿Fueron seis meses?
    • 16.438 × 180 = $2,958 pesos.

¿Y si ya renuncié?

Cuando terminas la relación laboral (por renuncia o despido), el aguinaldo proporcional debe incluirse en tu finiquito o liquidación, junto con otros derechos como:

  • Vacaciones no tomadas.
  • Prima vacacional.
  • Indemnización (si aplica).

El pago debe realizarse al momento de tu salida. Si no te lo dan, la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (Profedet) recomienda exigirlo formalmente.

¿Qué hacer si no te pagan el aguinaldo?

Si la empresa se pone Grinch y no cumple, tienes hasta un año para reclamarlo. Acude a la Profedet o a la Secretaría del Trabajo para que te asesoren de manera gratuita.

¡No lo dejes pasar!

El aguinaldo proporcional es tuyo, lo trabajaste y es un derecho que nadie puede quitarte. Antes de cerrar el año, asegúrate de recibir lo que te toca y que este diciembre no te falte ni el pavo, ni tus buenos pesos extras.

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